El sábado 2 de agosto falleció Mauro Matthei OSB, una de las figuras más significativas de la vida monástica en Chile. Una persona de gran erudición, políglota, que realizó un gran aporte en el campo de la historia, la cultura y la espiritualidad benedictina. Hoy recordamos su legado en nuestras páginas y, con la esperanza puesta en la resurrección, nos unimos a la comunidad benedictina en su dolor.
Primer monje benedictino chileno profeso en la Congregación del Cono Sur y una de las figuras más significativas de la vida monástica en nuestro país. Su vocación lo llevó, desde muy joven, a integrarse a la comunidad de la Abadía Benedictina de Las Condes, desde donde hizo un gran aporte no solo a la vida espiritual monástica, sino también al desarrollo cultural e intelectual chileno.
Fue una persona de gran erudición, pero también de un humor lleno de picardía; su sonrisa era su gran patrimonio. Nunca buscó cargos ni ascensos. Lo suyo fue, con convicción, el sacerdocio y la vida monástica. Tenía una fe sacramental firme y una auténtica vocación pastoral, especialmente cercana a los jóvenes.
Una de sus muchas cualidades fue ser un políglota consumado –dominaba el griego, latín, hebreo, francés, alemán e italiano–, lo que lo convirtió en un verdadero puente entre la tradición monástica occidental y los desafíos del pensamiento contemporáneo. Mantuvo amistad y diálogo con figuras clave de la cultura chilena como Alejandro Jodowsky, Jaime Eyzaguirre y Pedro Subercaseaux, con quienes compartió inquietudes filosóficas, espirituales y estéticas.
Su labor intelectual fue extensa. Fue colaborador habitual de la revista Humanitas y de Cuadernos Monásticos […]. Fue un gran promotor de la teología monástica en Chile.
Más allá del claustro, el padre Mauro fue un referente silencioso pero activo, comprometido con el diálogo entre fe y cultura, y siempre generoso en su guía espiritual.
Deja una huella profunda de humildad, sabiduría y servicio. Su legado sigue vivo en quienes lo conocimos y reconocemos en él a un gran benedictino.
Su legado en Humanitas
Artículos:
- “Evocando a Dom Pedro Subercaseaux O.S.B.” (Humanitas 19)
- “La Beatificación de Pío IX y Juan XXIII” (Humanitas 21)
- “25 años del pontificado de Juan Pablo II” (Humanitas 31)
- “Jerusalén, Atenas y Roma. Ciudades Símbolo de la Cultura Cristiana” (Humanitas 35)
- “Vocación a la santidad y quehacer político” (Humanitas 37)
- “Paradójica vitalidad del papado” (Humanitas 39)
- “Iglesia de Cristo: identidad o acomodamiento” (Humanitas 41)
- “Aproximaciones a Hildegarda de Bingen (1098-1179)” (Humanitas 42)
- “Paradigmas políticos del Bicentenario” (Humanitas 53)
- “Coloquios místicos sobre el sacerdocio en la persecución” (Humanitas 58)
- “Acerca de la Santidad en la Historia de Chile” (Humanitas 59)
- “Evocación del primer obispo de Santiago de Chile” (Humanitas 64)
- “Los ángeles caídos en la historia de la salvación” (Humanitas 65)
- “Juana Ross de Edwards entre el ‘Manifiesto Comunista’ (1848) y la Encíclica ‘Rerum Novarum’ (1891)” (1848) y la Encíclica ‘Rerum Novarum’ (1891)” (Humanitas 74)
- Reseña de su libro “Benedictus montes amabat” (Mauro Matthei, 2017), por Verónica Griffin (Humanitas 89)