El Mensaje del Papa Francisco para la 52ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales.

«La verdad os hará libres» (Jn 8, 32).
Noticias falsas y periodismo de paz

Queridos hermanos y hermanas:

En el proyecto de Dios, la comunicación humana es una modalidad esencial para vivir la comunión. El ser humano, imagen y semejanza del Creador, es capaz de expresar y compartir la verdad, el bien, la belleza. Es capaz de contar su propia experiencia y describir el mundo, y de construir así la memoria y la comprensión de los acontecimientos.

Pero el hombre, si sigue su propio egoísmo orgulloso, puede también hacer un mal uso de la facultad de comunicar, como muestran desde el principio los episodios bíblicos de Caín y Abel, y de la Torre de Babel (cf. Gn 4,1-16; 11,1-9). La alteración de la verdad es el síntoma típico de tal distorsión, tanto en el plano individual como en el colectivo. Por el contrario, en la fidelidad a la lógica de Dios, la comunicación se convierte en lugar para expresar la propia responsabilidad en la búsqueda de la verdad y en la construcción del bien.

Hoy, en un contexto de comunicación cada vez más veloz e inmersos dentro de un sistema digital, asistimos al fenómeno de las noticias falsas, las llamadas «fake news». Dicho fenómeno nos llama a la reflexión; por eso he dedicado este mensaje al tema de la verdad, como ya hicieron en diversas ocasiones mis predecesores a partir de Pablo VI (cf. Mensaje de 1972: «Los instrumentos de comunicación social al servicio de la verdad»). Quisiera ofrecer de este modo una aportación al esfuerzo común para prevenir la difusión de las noticias falsas, y para redescubrir el valor de la profesión periodística y la responsabilidad personal de cada uno en la comunicación de la verdad.

1. ¿Qué hay de falso en las «noticias falsas»?

«Fake news» es un término discutido y también objeto de debate. Generalmente alude a la desinformación difundida online o en los medios de comunicación tradicionales. Esta expresión se refiere, por tanto, a informaciones infundadas, basadas en datos inexistentes o distorsionados, que tienen como finalidad engañar o incluso manipular al lector para alcanzar determinados objetivos, influenciar las decisiones políticas u obtener ganancias económicas.

La eficacia de las fake news se debe, en primer lugar, a su naturaleza mimética, es decir, a su capacidad de aparecer como plausibles. En segundo lugar, estas noticias, falsas pero verosímiles, son capciosas, en el sentido de que son hábiles para capturar la atención de los destinatarios poniendo el acento en estereotipos y prejuicios extendidos dentro de un tejido social, y se apoyan en emociones fáciles de suscitar, como el ansia, el desprecio, la rabia y la frustración. Su difusión puede contar con el uso manipulador de las redes sociales y de las lógicas que garantizan su funcionamiento. De este modo, los contenidos, a pesar de carecer de fundamento, obtienen una visibilidad tal que incluso los desmentidos oficiales difícilmente consiguen contener los daños que producen.

La dificultad para desenmascarar y erradicar las fake news se debe asimismo al hecho de que las personas a menudo interactúan dentro de ambientes digitales homogéneos e impermeables a perspectivas y opiniones divergentes. El resultado de esta lógica de la desinformación es que, en lugar de realizar una sana comparación con otras fuentes de información, lo que podría poner en discusión positivamente los prejuicios y abrir un diálogo constructivo, se corre el riesgo de convertirse en actores involuntarios de la difusión de opiniones sectarias e infundadas. El drama de la desinformación es el desacreditar al otro, el presentarlo como enemigo, hasta llegar a la demonización que favorece los conflictos. Las noticias falsas revelan así la presencia de actitudes intolerantes e hipersensibles al mismo tiempo, con el único resultado de extender el peligro de la arrogancia y el odio. A esto conduce, en último análisis, la falsedad.

2. ¿Cómo podemos reconocerlas?

Ninguno de nosotros puede eximirse de la responsabilidad de hacer frente a estas falsedades. No es tarea fácil, porque la desinformación se basa frecuentemente en discursos heterogéneos, intencionadamente evasivos y sutilmente engañosos, y se sirve a veces de mecanismos refinados. Por eso son loables las iniciativas educativas que permiten aprender a leer y valorar el contexto comunicativo, y enseñan a no ser divulgadores inconscientes de la desinformación, sino activos en su desvelamiento. Son asimismo encomiables las iniciativas institucionales y jurídicas encaminadas a concretar normas que se opongan a este fenómeno, así como las que han puesto en marcha las compañías tecnológicas y de medios de comunicación, dirigidas a definir nuevos criterios para la verificación de las identidades personales que se esconden detrás de millones de perfiles digitales.

Pero la prevención y la identificación de los mecanismos de la desinformación requieren también un discernimiento atento y profundo. En efecto, se ha de desenmascarar la que se podría definir como la «lógica de la serpiente», capaz de camuflarse en todas partes y morder. Se trata de la estrategia utilizada por la «serpiente astuta» de la que habla el Libro del Génesis, la cual, en los albores de la humanidad, fue la artífice de la primera fake news (cf. Gn 3,1-15), que llevó a las trágicas consecuencias del pecado, y que se concretizaron luego en el primer fratricidio (cf. Gn 4) y en otras innumerables formas de mal contra Dios, el prójimo, la sociedad y la creación.

La estrategia de este hábil «padre de la mentira» (Jn 8,44) es la mímesis, una insidiosa y peligrosa seducción que se abre camino en el corazón del hombre con argumentaciones falsas y atrayentes. En la narración del pecado original, el tentador, efectivamente, se acerca a la mujer fingiendo ser su amigo e interesarse por su bien, y comienza su discurso con una afirmación verdadera, pero sólo en parte: «¿Conque Dios os ha dicho que no comáis de ningún árbol del jardín?» (Gn 3,1). En realidad, lo que Dios había dicho a Adán no era que no comieran de ningún árbol, sino tan solo de un árbol: «Del árbol del conocimiento del bien y el mal no comerás» (Gn 2,17). La mujer, respondiendo, se lo explica a la serpiente, pero se deja atraer por su provocación:«Podemos comer los frutos de los árboles del jardín; pero del fruto del árbol que está en mitad del jardín nos ha dicho Dios: “No comáis de él ni lo toquéis, de lo contrario moriréis”» (Gn 3,2). Esta respuesta tiene un sabor legalista y pesimista: habiendo dado credibilidad al falsario y dejándose seducir por su versión de los hechos, la mujer se deja engañar. Por eso, enseguida presta atención cuando le asegura: «No, no moriréis» (v. 4). Luego, la deconstrucción del tentador asume una apariencia creíble: «Dios sabe que el día en que comáis de él, se os abrirán los ojos, y seréis como Dios en el conocimiento del bien y el mal» (v. 5). Finalmente, se llega a desacreditar la recomendación paternal de Dios, que estaba dirigida al bien, para seguir la seductora incitación del enemigo: «La mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno de comer, atrayente a los ojos y deseable» (v. 6). Este episodio bíblico revela por tanto un hecho esencial para nuestro razonamiento: ninguna desinformación es inocua; por el contrario, fiarse de lo que es falso produce consecuencias nefastas. Incluso una distorsión de la verdad aparentemente leve puede tener efectos peligrosos.

De lo que se trata, de hecho, es de nuestra codicia. Las fake news se convierten a menudo en virales, es decir, se difunden de modo veloz y difícilmente manejable, no a causa de la lógica de compartir que caracteriza a las redes sociales, sino más bien por la codicia insaciable que se enciende fácilmente en el ser humano.

Las mismas motivaciones económicas y oportunistas de la desinformación tienen su raíz en la sed de poder, de tener y de gozar que en último término nos hace víctimas de un engaño mucho más trágico que el de sus manifestaciones individuales: el del mal que se mueve de falsedad en falsedad para robarnos la libertad del corazón. He aquí porqué educar en la verdad significa educar para saber discernir, valorar y ponderar los deseos y las inclinaciones que se mueven dentro de nosotros, para no encontrarnos privados del bien «cayendo» en cada tentación.

3. «La verdad os hará libres» (Jn 8,32)

La continua contaminación a través de un lenguaje engañoso termina por ofuscar la interioridad de la persona. Dostoyevski escribió algo interesante en este sentido: «Quien se miente a sí mismo y escucha sus propias mentiras, llega al punto de no poder distinguir la verdad, ni dentro de sí mismo ni en torno a sí, y de este modo comienza a perder el respeto a sí mismo y a los demás. Luego, como ya no estima a nadie, deja también de amar, y para distraer el tedio que produce la falta de cariño y ocuparse en algo, se entrega a las pasiones y a los placeres más bajos; y por culpa de sus vicios, se hace como una bestia. Y todo esto deriva del continuo mentir a los demás y a sí mismo» (Los hermanos Karamazov, II,2).

Entonces, ¿cómo defendernos? El antídoto más eficaz contra el virus de la falsedad es dejarse purificar por la verdad. En la visión cristiana, la verdad no es sólo una realidad conceptual que se refiere al juicio sobre las cosas, definiéndolas como verdaderas o falsas. La verdad no es solamente el sacar a la luz cosas oscuras, «desvelar la realidad», como lleva a pensar el antiguo término griego que la designa, aletheia (de a-lethès, «no escondido»). La verdad tiene que ver con la vida entera. En la Biblia tiene el significado de apoyo, solidez, confianza, como da a entender la raíz ‘aman, de la cual procede también el Amén litúrgico. La verdad es aquello sobre lo que uno se puede apoyar para no caer. En este sentido relacional, el único verdaderamente fiable y digno de confianza, sobre el que se puede contar siempre, es decir, «verdadero», es el Dios vivo. He aquí la afirmación de Jesús: «Yo soy la verdad» (Jn 14,6). El hombre, por tanto, descubre y redescubre la verdad cuando la experimenta en sí mismo como fidelidad y fiabilidad de quien lo ama. Sólo esto libera al hombre: «La verdad os hará libres» (Jn 8,32).

Liberación de la falsedad y búsqueda de la relación: he aquí los dos ingredientes que no pueden faltar para que nuestras palabras y nuestros gestos sean verdaderos, auténticos, dignos de confianza. Para discernir la verdad es preciso distinguir lo que favorece la comunión y promueve el bien, y lo que, por el contrario, tiende a aislar, dividir y contraponer. La verdad, por tanto, no se alcanza realmente cuando se impone como algo extrínseco e impersonal; en cambio, brota de relaciones libres entre las personas, en la escucha recíproca. Además, nunca se deja de buscar la verdad, porque siempre está al acecho la falsedad, también cuando se dicen cosas verdaderas. Una argumentación impecable puede apoyarse sobre hechos innegables, pero si se utiliza para herir a otro y desacreditarlo a los ojos de los demás, por más que parezca justa, no contiene en sí la verdad. Por sus frutos podemos distinguir la verdad de los enunciados: si suscitan polémica, fomentan divisiones, infunden resignación; o si, por el contrario, llevan a la reflexión consciente y madura, al diálogo constructivo, a una laboriosidad provechosa.

4. La paz es la verdadera noticia

El mejor antídoto contra las falsedades no son las estrategias, sino las personas, personas que, libres de la codicia, están dispuestas a escuchar, y permiten que la verdad emerja a través de la fatiga de un diálogo sincero; personas que, atraídas por el bien, se responsabilizan en el uso del lenguaje. Si el camino para evitar la expansión de la desinformación es la responsabilidad, quien tiene un compromiso especial es el que por su oficio tiene la responsabilidad de informar, es decir: el periodista, custodio de las noticias. Este, en el mundo contemporáneo, no realiza sólo un trabajo, sino una verdadera y propia misión. Tiene la tarea, en el frenesí de las noticias y en el torbellino de las primicias, de recordar que en el centro de la noticia no está la velocidad en darla y el impacto sobre las cifras de audiencia, sino las personas. Informar es formar, es involucrarse en la vida de las personas. Por eso la verificación de las fuentes y la custodia de la comunicación son verdaderos y propios procesos de desarrollo del bien que generan confianza y abren caminos de comunión y de paz.

Por lo tanto, deseo dirigir un llamamiento a promover un periodismo de paz, sin entender con esta expresión un periodismo «buenista» que niegue la existencia de problemas graves y asuma tonos empalagosos. Me refiero, por el contrario, a un periodismo sin fingimientos, hostil a las falsedades, a eslóganes efectistas y a declaraciones altisonantes; un periodismo hecho por personas para personas, y que se comprende como servicio a todos, especialmente a aquellos –y son la mayoría en el mundo– que no tienen voz; un periodismo que no queme las noticias, sino que se esfuerce en buscar las causas reales de los conflictos, para favorecer la comprensión de sus raíces y su superación a través de la puesta en marcha de procesos virtuosos; un periodismo empeñado en indicar soluciones alternativas a la escalada del clamor y de la violencia verbal.

Por eso, inspirándonos en una oración franciscana, podríamos dirigirnos a la Verdad en persona de la siguiente manera:

Señor, haznos instrumentos de tu paz.
Haznos reconocer el mal que se insinúa en una comunicación que no crea comunión.
Haznos capaces de quitar el veneno de nuestros juicios.
Ayúdanos a hablar de los otros como de hermanos y hermanas.
Tú eres fiel y digno de confianza; haz que nuestras palabras sean semillas de bien para el mundo:
donde hay ruido, haz que practiquemos la escucha;
donde hay confusión, haz que inspiremos armonía;
donde hay ambigüedad, haz que llevemos claridad;
donde hay exclusión, haz que llevemos el compartir;
donde hay sensacionalismo, haz que usemos la sobriedad;
donde hay superficialidad, haz que planteemos interrogantes verdaderos;
donde hay prejuicio, haz que suscitemos confianza;
donde hay agresividad, haz que llevemos respeto;
donde hay falsedad, haz que llevemos verdad.

Amén.


 Fuente: El Vaticano

Últimas Publicaciones

FRANCISCO DIEZ CLAVES DEL PONTIFICADO DE FRANCISCO , por Redacción Humanitas (2025). Desde la Redacción de revista Humanitas , recogemos diez aspectos determinantes del pontificado de Francisco: convivir con un Papa emérito, sus encíclicas y documentos importantes, viajes apostólicos, el combate a la cultura de los abusos, reforma de la Curia, su marcado ecumenismo, diplomacia vaticana, sinodalidad, enseñanza social, acento en la misericordia y en la esperanza. COMO UN HURACÁN DEL ESPÍRITU SANTO , por Jaime Antúnez Aldunate ( Humanitas 70 , 2013). Sin que mediase ningún signo previo, la Iglesia católica y el mundo entero ha presenciado, a partir de la renuncia al pontificado romano de S.S. Benedicto XVI el 11 de febrero de 2013 –y en un plazo de pocas semanas– el desencadenarse de una procesión de hechos magnos, como en una especie de súbito huracán del Espíritu Santo. En este editorial Jaime Antúnez, el entonces director de Humanitas, reflexiona sobre el hecho de la elección de un primer Papa latinoamericano y jesuita para la Iglesia universal. INTRODUCCIÓN A JORGE MARIO BERGOGLIO, UNA BIOGRAFÍA INTELECTUAL por Massimo Borghesi ( Humanitas 86 , 2017). En su libro Jorge Mario Bergoglio. Una biografía intelectual (Encuentro, 2018), el filósofo Massimo Borghesi expone y analiza las raíces intelectuales de Jorge Mario Bergoglio, desde su formación en la escuela jesuítica, hasta la influencia de la antropología de la polaridad de Romano Guardini y el pensamiento de Alberto Methol Ferré. Compartimos la introducción de la obra, cuya publicación fue autorizada para formar parte de Humanitas 86, 2017, número dedicado a la venida del Papa Francisco a Chile. LA INVOCACIÓN DEL “PUEBLO DE DIOS” EN EL PAPA FRANCISCO, por Eduardo Valenzuela Carvallo ( Humanitas 89 , 2018). La expresión Pueblo de Dios constituye, en la teología de Francisco, una renovada confianza “en la fuerza evangelizadora de la piedad popular” y de sus diversas expresiones. Con ella, el Santo Padre pone el acento en el llamado universal al sacerdocio y en la capacidad de todos los bautizados de “dar razón de la esperanza”. En la fidelidad del pueblo, de aquel “santo de la puerta de al lado”, la Iglesia ve un contrapeso frente al clericalismo que controla y frena la unción de Dios sobre su pueblo y que, en palabras de Francisco, “se olvida que la visibilidad y sacramentalidad de la Iglesia pertenece a todo el Pueblo fiel de Dios”. DISCERNIR Y REFORMAR: LA “OPCIÓN DE FRANCISCO” PARA EVANGELIZAR A UN MUNDO LÍQUIDO, por Austen Ivereigh ( Humanitas 90 , 2019). En este artículo, que repasa el origen del pensamiento y convicciones del Papa Francisco, Austen Ivereigh, periodista y escritor inglés, y uno de sus biógrafos, sugiere que el Santo Padre “ve en la tribulación y agitación de la Iglesia una oportunidad para una conversión paciente a través de una dependencia en la misericordia de Dios renovada, humilde y alegre”. Este artículo fue originalmente publicado en The Way en octubre de 2018. Humanitas obtuvo permiso del autor y de la revista digital para traducir y a la vez publicar el texto. LO LOCAL Y LO UNIVERSAL EN EL PENSAMIENTO DEL PAPA FRANCISCO, por Javier Aparicio ( Humanitas 100 , 2022). Tomando como base Evangelii gaudium y Fratelli tutti, el autor hace un recorrido por el pensamiento del Papa Francisco centrándose en los conceptos de local y universal, los que se insertarían en un marco más complejo de cuatro principios: el tiempo es superior al espacio, la unidad prevalece sobre el conflicto, la realidad es más importante que la idea y el todo es superior a la parte. Estos corresponderían a una llamada ecuménica que hace el Santo Padre para regenerar la vida política, económica, social y cultural, situándolo como un pensador de la globalización. REFORMAS REFORMA DE LA CURIA ROMANA, por Cardenal Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga ( Humanitas 86 , 2017). La reforma de la Curia Romana que ha llevado a cabo Francisco se orienta, ante todo, hacia el bien y el servicio, es un signo de la vivacidad de la Iglesia en camino, en peregrinación y, por ello, semper reformanda. En este artículo, el arzobispo de Tegucigalpa, Honduras, y coordinador del Consejo de Cardenales para la reforma de la Curia Romana, explica algunos aspectos fundamentales de los cambios promovidas por Francisco. TRADITIONIS CUSTODES: FRANCISCO ANTE UNA DECISIÓN DIFÍCIL, por Joaquín García-Huidobro ( Humanitas 98 , 2021). La publicación del Motu Proprio Traditionis custodes ha suscitado diversas polémicas. Tras consultar a los obispos acerca de los frutos de las normas dictadas que permitían una amplia celebración de la Misa según el Misal de 1962, el Papa ha constatado con decepción que no han sido los esperados. “Lo que debía mover a la unidad se ha usado como pretexto para una mayor división”. El autor nos ayuda a ahondar en la historia, las razones y las posturas que existen tras esta difícil decisión. EL MOMENTO CATÓLICO ACTUAL ES LA REFORMA DE LA IGLESIA, por Emilce Cuda ( Humanitas 100 , 2022). Para su número 100, Humanitas realizó una ronda amplia de artículos con participantes de sensibilidades diversas, de dentro y fuera del país, que respondieron a la pregunta “¿cómo percibe usted el momento católico actual?”. Las respuestas entregaron una mirada global de la Iglesia y su entorno y de los nuevos desafíos que se enfrentan. Presentamos a continuación la contribución de Emilce Cuda, entonces secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina. COMENTARIO SOBRE LA NUEVA CONSTITUCIÓN APOSTÓLICA PRAEDICATE EVANGELIUM, por Francisco Astaburuaga ( Humanitas 100 , 2022). El 19 de marzo del 2022 se promulgó una nueva Constitución Apostólica sobre la Curia Romana y su servicio a la Iglesia y al mundo, Praedicate Evangelium. El texto se desarrolla en un total de 250 artículos, donde cada uno de ellos se entrelaza en un cuerpo coherente de normativas con el único fin de que la Curia Romana esté al servicio de la Iglesia en el anuncio del Evangelio. LA BELLEZA DEL SÍMBOLO: DESIDERIO DESIDERAVI, por Joaquín García-Huidobro ( Humanitas 101 , 2022). El 29 de junio de 2022, día en que se celebra a los apóstoles Pedro y Pablo, Francisco publicó Desiderio desideravi, una Carta apostólica al Pueblo de Dios sobre la liturgia, para recordar el sentido profundo de la celebración eucarística surgida del Concilio e invitar a la formación litúrgica. El autor realiza una lectura comprensiva de la Carta, dando cuenta de su sentido, importancia y novedad. MAGISTERIO Encíclica Lumen fidei LUZ DE LA FE, por Juan de Dios Vial Larraín ( Humanitas 71 , 2013). Fechada el 29 de junio de 2013, Lumen fidei constituye la primera encíclica de Francisco. Se trata de una encíclica escrita a “cuatro manos”, donde es posible vislumbrar los aportes teológicos de Benedicto XVI. El texto busca actualizar la esencia de la virtud de la fe, la que “no es un espejismo que nos impide avanzar como hombres libres hacia el futuro” (n. 2), sino que, al contrario, permite que el creyente comprenda que “la verdad le hace humilde sabiendo que más que poseerla él, es ella la que le abraza y posee. En lugar de hacernos intolerantes, la seguridad de la fe nos pone en camino y hace posible el testimonio y el diálogo con todos” (n. 34). Compartimos el editorial que el filósofo Juan de Dios Vial Larraín realizó en Humanitas tras su publicación. Exhortación apostólica Evangelii gaudium “TODO EL PUEBLO DE DIOS ANUNCIA EL EVANGELIO”, por Pedro Morandé Court (2013, Humanitas 86 , 2017). La Evangelii gaudium fue el primer documento de Francisco, donde indicaba las prioridades que la Iglesia debía afrontar y, por lo tanto, en ella se vislumbra la hoja de ruta de su ministerio petrino. Las ideas principales de la exhortación pueden encontrarse en la rica eclesiología del Pueblo de Dios desarrollada en Latinoamérica, que el sociólogo Pedro Morandé destaca en este artículo. Encíclica Laudato si’ UNA RERUM NOVARUM PARA EL SIGLO XXI, por Ricardo Lagos Escobar ( Humanitas, Cuaderno 34 , 2015). El 31 de agosto de 2015, el rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Ignacio Sánchez, y el director de Humanitas , Jaime Antúnez, convocaron a un Coloquio en torno a la encíclica Laudato si’. El acto contó con la participación de Ricardo Lagos, ex presidente de la República y entonces miembro de la Comisión Mundial sobre la Economía y el Clima. En su intervención, Lagos destacó el cambio de paradigma que ofrece el documento magisterial, constituyéndose en un aporte que tendría el mismo impacto y trascendencia que tuvo la Rerum novarum de León XIII. HACIA UNA VERDADERA CONVERSIÓN ECOLÓGICA, por Eduardo Valenzuela ( Humanitas, Cuaderno 34 , 2015). En su intervención en el Coloquio sobre Laudato si’ , realizado el 31 de agosto de 2015 en la Universidad Católica, el sociólogo destaca el llamado de Francisco a una “conversión ecológica”, donde se le dé a la naturaleza un valor intrínseco, conectándola decididamente con nuestra propia redención espiritual. Así, señala, el documento buscaría aclarar las fuentes religiosas de una actitud favorable hacia la naturaleza y admitiría la posibilidad de que la naturaleza sea el soporte de una auténtica ética y espiritualidad. Exhortación apostólica postsinodal Amoris laetitia “LA ALEGRÍA DEL AMOR” NOS INTERPELA, por Henri Hude ( Humanitas 81 , 2016). Amoris laetitia (“La alegría del amor” en latín) es la segunda exhortación apostólica postsinodal del Papa Francisco, firmada el día 19 de marzo de 2016. En este editorial especial de Humanitas , el filósofo francés Henri Hude hace una interpelación y clarificación a los católicos de ala conservadora que se vieron desestabilizados por la publicación del documento. Llama a que las élites se pongan al servicio de los pueblos como primera condición para la credibilidad moral de la evangelización, donde se reconozca que servir a las condiciones materiales de vida es también servir al amor de las familias. LA “FAMILIA GRANDE”. UNA LECTURA SOCIOLÓGICA SOBRE LA IMPORTANCIA DE LA FAMILIA AMPLIADA EN AMORIS LAETITIA , por Consuelo Araos y Catalina Siles ( Humanitas 97 , 2021). Las investigadoras realizan una revisión de la evidencia que hay detrás del acento que el Papa Francisco ha puesto sobre la importancia de la realidad familiar más allá del núcleo conyugal; un aspecto particularmente original de esta exhortación apostólica sobre familia, el cual es revelador de un agudo realismo sociológico del Papa Francisco, y que quizás se deba en parte a su propio enraizamiento en la cultura familiar latinoamericana. Exhortación apostólica Gaudete et exsultate LA SANTIDAD SEGÚN EL PAPA FRANCISCO, Y SUS RAÍCES TEOLÓGICAS, por Palma Ventrella ( Humanitas 104 , 2023). A lo largo de los 177 números que conforman la exhortación apostólica Gaudete et exsultate aparecen continuamente definiciones explícitas e implícitas de lo que Francisco piensa que es la santidad hoy en día. Este artículo propone destacar seis de ellas, intentando también rastrear sus raíces teológicas, con la única intención de crecer en el conocimiento del misterio de Dios y del misterio del hombre. Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la región Panamazónica UNA IGLESIA CON ROSTRO AMAZÓNICO, CAMINO PARA UNA ECOLOGÍA INTEGRAL, por Sofía Brahm ( Humanitas 92 , 2019). En octubre 2019 se llevó a cabo el Sínodo Especial para la Amazonía. Este ha querido contribuir a un discernimiento sobre la presencia de la Iglesia en la Amazonía y sobre los caminos para una ecología integral. Dos reflexiones fueron centrales en su desarrollo, una sobre ecología cultural y otra sobre ecología natural. Encíclica Fratelli tutti EL AMOR AL CENTRO DE LA VIDA SOCIAL, por Cardenal Fernando Chomali ( Humanitas 95 , 2020). La tercera encíclica del Papa Francisco, Fratelli tutti , sobre la fraternidad y la amistad social, es, para el entonces arzobispo de Concepción, su testamento espiritual. Ella nos permitiría obtener una radiografía del alma y del pensamiento del Papa Francisco, el que posiciona al amor como criterio guía para todos, en la vida personal, política y social. Ello pues Francisco comprendería que “si queremos poner al ser humano y su dignidad en el centro de la sociedad, no podemos dejar de lado su vocación fundamental y su más profundo anhelo: amar y ser amado”. TRES CLAVES TEOLÓGICAS DE FRATELLI TUTTI, por Antonio Amado ( Humanitas 95 , 2020). En el marco de la publicación especial “Hablemos sobre Fratelli tutti: diez miradas para aportar a la reflexión sobre la dignidad de la persona humana”, el filósofo Antonio Amado plantea que esta encíclica constituye una reflexión hondamente personal, en la que el Papa Francisco abre su corazón de padre y pastor. Destaca cómo, con actitud de diálogo, pero desde el corazón mismo del Evangelio, propone la parábola del Buen Samaritano para iluminar la opción que debemos tomar para reconstruir este mundo herido. FRATERNIDAD. Y DIGNIDAD, por Paula Luengo Kanacri ( Humanitas 95 , 2020). La académica destaca la dignidad como elemento precursor de la fraternidad. Con Fratelli tutti , señala, Francisco trazaría el lugar desde el cual puede y debe darse la transformación social: “desde el reconocimiento de quien queda al margen, de quien es privado de su dignidad, de quien no es reconocido parte de la familia como los demás, de quien no está invitado a la mesa o queda a la orilla del camino, de quien no vemos o preferimos no ver”. Exhortación apostólica Laudate Deum “LA VIDA HUMANA ES INCOMPRENSIBLE E INSOSTENIBLE SIN LAS DEMÁS CRIATURAS”, por Román Guridi ( Humanitas 105 , 2023). El Papa Francisco puso urgencia nuevamente al tema de la crisis climática con su exhortación apostólica Laudate Deum, publicada el 4 de octubre de 2023. El teólogo Román Guridi destaca la importancia del concepto de antropocentrismo situado, presente en la exhortación, como aquel concepto donde se inscribe la problematización del lugar que ocupa el hombre como una de las causas relevantes de los desafíos ecológicos que enfrentamos. Encíclica Dilexit nos DEL CORAZÓN HUMANO AL CORAZÓN DIVINO. LA ANTROPOLOGÍA ORIGENIANA EN LA ENCÍCLICA DILEXIT NOS, por Fernando Soler ( Humanitas 108 , 2024). La última encíclica que escribió Francisco, Dilexit nos , fue publicada a fines de octubre del 2024. Centrada en el Sagrado Corazón de Jesús, nos habla “sobre el amor humano y divino” del Hijo de Dios. El Papa elabora una profunda reflexión sobre el corazón como centro integrador de la persona humana y lugar de encuentro con el amor divino. Este artículo busca sistematizar las principales características del corazón presentadas en la encíclica, profundizando especialmente en las referencias a Orígenes de Alejandría. BERGOGLIO EN HUMANITAS BUSCAR EL CAMINO HACIA EL FUTURO, LLEVANDO CONSIGO LA MEMORIA DE LAS RAÍCES, por Cardenal Jorge Mario Bergoglio ( Humanitas 47 , 2007). El hombre de hoy experimenta continuamente la sensación de orfandad y desarraigo. La sociedad latinoamericana sufre de un peligroso déficit de memoria, como potencia integradora de la historia, y una desvalorización de la tradición. Este texto fue publicado en italiano por la revista Nuntium de la Pontificia Universidad Lateranense de Roma, como parte de una serie dedicada a cada uno de los cinco continentes. El presente daba cuenta de Latinoamérica. La reflexión del autor y entonces arzobispo de Buenos Aires, quien autorizó la reproducción en Humanitas, fue aquí resumida, desde su versión original en castellano, suprimiendo las partes referidas a la Argentina, en particular. Volver al índice
La Dirección Editorial del Dicasterio para la Comunicación, presenta el documental «León de Perú», con imágenes que recorre los pasos de la misión de Robert Francis Prevost en Perú. Un recorrido por Chiclayo, Chulucanas, Callao, Lima y Trujillo para descubrir la figura del Pontífice agustino a través de las voces y testimonios de quienes lo conocieron, trabajaron con él o recibieron su ayuda como misionero y pastor.
Desde la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que sufre, y en el marco del Domingo de Oración por la Iglesia Perseguida, nos llega un llamado a recordar a quienes arriesgan la vida por vivir su fe.
Revistas
Cuadernos
Reseñas
Suscripción
Palabra del Papa
Diario Financiero