Ver índice de catequesis del Papa sobre los Mandamientos


Queridos hermanos y hermanas:

El texto de los diez mandamientos está precedido por una frase que pone de manifiesto la generosidad de Dios, recordando que Dios liberó a su pueblo y lo sacó de la esclavitud. Es una muestra más de que Nuestro Dios primero salva y después nos pide confianza.

Desde esta perspectiva, la vida cristiana no es simplemente un obedecer normas ni cumplir deberes, tampoco depende solo de nuestra fuerza de voluntad, sino que es una respuesta agradecida a un Padre generoso que nos ama y nos libera. Un corazón que ha sido tocado por el Espíritu Santo es agradecido y recuerda la bondad de Dios y los muchos beneficios que ha recibido de él.

Si alguien no ha hecho todavía experiencia de la acción liberadora de Dios en su vida, necesita elevar su grito al Padre como hizo el pueblo de Israel, él siempre escucha el lamento de sus hijos y los libera. Nosotros no podemos salvarnos únicamente con nuestras propias fuerzas, pero podemos gritar pidiendo ayuda. Esto es ya una forma de oración, que brota de lo que en nosotros existe de oprimido y necesitado de libertad. Dios escucha siempre nuestro grito, pues él nos ha llamado a vivir como hijos libres y agradecidos, obedeciendo con alegría a aquel que nos ha dado mucho más de lo que nosotros podremos darle.

Continuar a la próxima catequesis

Volver a la anterior


Saludos:

Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España y Latinoamérica.

Los invito a que, recordando todo lo bueno que Dios ha hecho en ustedes, respondan con libertad y alegría a la llamada de Dios, que nos ama y nos libra de nuestras esclavitudes para que podamos vivir como sus hijos amados. Que Dios los bendiga. Muchas gracias.


Fuente: El Vaticano

Últimas Publicaciones

El ataque sorpresa de grupos rebeldes y yihadistas contra Alepo, que comenzó la semana pasada, revivió el fantasma de un recrudecimiento de la guerra civil en este país. La incursión provocó una contraofensiva del ejército sirio –leal al régimen del presidente Bashar al Assad– con devastadores ataques aéreos contra la ciudad, sembrando el pánico no sólo en esa región, sino en toda Siria, que vive en un estado de inseguridad permanente producto de la guerra civil que lleva más de 13 años.
“Formar es ante todo cuidar de la persona y, por tanto, es una discreta, preciosa y delicada acción de caridad. De lo contrario, la acción formativa se convierte en un intelectualismo árido o en un narcisismo perverso, en una verdadera concupiscencia espiritual donde los demás existen solo como espectadores que aplauden, cajas que deben llenarse con el ego del maestro”. (Francisco, Universidad Gregoriana, 5 de noviembre de 2024)
Si bien ningún conflicto se ha apaciguado, y la violencia se manifiesta de diversas formas en todos los continentes, el Papa no ha dejado de insistir en la búsqueda la paz, la armonía y el cultivo de la esperanza. Los preparativos en torno al jubileo del próximo año unidos a las conclusiones del Sínodo sobre la Sinodalidad y la nueva encíclica publicada a fines de octubre, son un marco de crecimiento y profundización para el acontecer cotidiano de la Iglesia en el mundo.
Revistas
Cuadernos
Reseñas
Suscripción
Palabra del Papa
Diario Financiero